_

Claudio, David y Matías encabezan emprendimientos gastronómicos en calle Arístides Villanueva. La situación es complicada para cada uno de ellos, como para el rubro gastronómico en general. Por eso están solicitando, a través de una petición en la plataforma change.org, una reducción impositiva, de carácter temporal.
Claudio comenta que desde hace cinco meses “seguimos pagando impuestos, alquileres, mientras nuestras ventas han bajado 90 % con esta pandemia. La mercadería sigue subiendo, y sin embargo desde enero no hemos podido actualizar los precios”.
Claudio lamenta que no haya ayuda efectiva desde distintos sectores a cargo y advierte: “Muchos de nuestros colegas ya han decidido bajar las persianas, cerrar las puertas y apagar las hornallas. Estamos pasando un momento muy difícil que estamos resistiendo con trabajo, pero necesitamos ser escuchados”.
David, por su parte, reafirma: “Las ventas no nos acompañan, en muchos casos son nulas. En buena parte del país los bares no están abriendo. Los que lo hacemos, lo estamos haciendo con muchísimas limitaciones, como en Mendoza, y no podemos llegar a subsistir. Las ventas no nos acompañan para ni siquiera cubrir los gastos fijos que tenemos”.
“No podemos pagar contribuciones sociales, ART, sindicatos, impuestos, alquileres. No podemos comprar la materia prima para seguir trabajando. Ya que desde el Estado no nos poder porque muchos no calificamos a los créditos o se nos hace imposible pedirlos, pedimos que por lo menos nos bajen algunos impuestos, como IVA o impuesto a las ganancias”, señala David.
A la vez, con voz angustiada el emprendedor gastronómico solicita: “Que nos ayude el gobierno, provincial o nacional, para poder nosotros estar en pie, porque a este paso y por este camino es inevitable el cierre de la actividad. Nadie quiere cerrar algo que construyó con tanto esfuerzo, con tanto sacrificio y durante tanto tiempo. En este camino es inevitable, casi inexorable, que tengamos el triste final de cerrar nuestras puertas”.
Como muchos, el rubro gastronómico sufre los golpes de la pandemia y de la recesión económica que implica. Según datos recabados por los propios emprendedores, en todo el país el sector pierde el 75% de empleo desde el comienzo de la pandemia. Cada día que pasa 90 locales gastronómicos se ven obligados a cerrar, sin poder afrontar sus compromisos.
La industria gastronómica argentina, basada en pymes, emplea de manera formal y directa a más de 350.000 personas. Implica que 1 de cada 15 asalariados del sector privado a nivel nacional trabaja directamente en esta industria. Además, el rubro se caracteriza por el empleo joven, ya que más del 70% de sus trabajadores tienen menos de 24 años.
Matías inauguró su local en la Arístides el 4 de marzo de 2020. El 12, tuvo que cerrarlo. Hasta entonces, Matías empleaba diariamente a 8 personas, durante toda la semana. Hoy, esas 8 personas conservan su trabajo, pero lo desarrollan de forma rotativa. “Abrimos solamente viernes y sábado. No hemos sacada a nadie, pero sí estamos haciendo rotar el personal. Hoy están trabajando de a tres personas, los fines de semana únicamente”, explica.
Con la capacidad de ocupación reducida a la mitad, se estima que el rubro está trabajando al 50%. Sin embargo, Matías señala que, en realidad, “estamos trabajando entre un 10% y 15% de lo que trabajábamos normalmente”.
“Sabemos que hay rubros mucho más golpeados, pero esto nos está pegando mucho”, señala el propietario del local. Y reitera el pedido de una reducción impositiva y temporal. Si bien desde los municipios se les otorgan prorrogas de tasas municipales, “tenemos que terminar pagándolas”. Por eso solicitan estas reducciones, para alivianar las cargas impositivas.
Desde todo el país, los gastronómicos hacen hincapié en la carga impositiva de la Argentina, en comparación con otros países de la región. “Hay pandemia, debe haber nuevas reglas. Acá entonces la necesidad imperiosa, para ahora y hacia adelante, de destrabar las medidas que aceleran el flujo.”, manifiestan en su pedido al que invitan a adherir a través de una firma virtual.
Pasando en limpio, el reclamo urgente de los gastronómicos de todo el país consiste en: reducción al 50% en el pago de IVA, reducción al 50% en el pago de Ingresos Brutos, reducción de aportes y contribuciones; por tiempo indefinido, de aplicación inmediata y para todos. “Es la única posibilidad que tiene la industria para sobrevivir”, reclaman a las autoridades municipales, provinciales y nacionales.
Podés firmar la petición hecha por el sector gastronómico argentino ingresando a: http://chng.it/4fbfRJHnRn. También puede accederse a la información sobre la difícil situación del sector y adherir a través del #sillasalrevés en redes sociales.